Agencia AJN.- Mario Correa es panameño, tiene 29 años y recientemente culminó su maestría en Ciencias de las Plantas en la Universidad Hebrea. En una entrevista con la Agencia AJN, destacó: “Israel es un país donde no hay agua y la tierra no es muy buena para los cultivos. Sin embargo, provee de frutas y verduras a gran parte de Europa. Eso habla muy bien de la tecnología de Israel”.
Agencia AJN.- Llegó a Israel desde Panamá en 2019. Estudió una maestría en Ciencias de las Plantas en la Facultad de Agricultura de la Universidad Hebrea, en Rehovot. Antes de la pandemia, pudo recorrer el Estado hebreo, sus lugares sagrados, sus desiertos, su cultura. Es la historia de Mario Correa, el estudiante que ya terminó su práctica profesional y vuelve a su país natal ansioso por aplicar todo lo aprendido. En una entrevista con la Agencia AJN, afirmó que recomendaría, a todos los que tengan la oportunidad, realizar la misma experiencia que tuvo él en Israel.
-¿Es frecuente que el gobierno de Panamá fomente las capacitaciones en Israel?
-El gobierno tiene un programa muy interesante de becas, que casi no hay en otros países de Latinoamérica. He hablado con otros compañeros, ya sea de Honduras, Colombia o Costa Rica, y la verdad que no tienen un programa de becas tan interesante como el de Panamá, que apoya tanto al estudiante a ponerse a aprender a nivel internacional. No es la primera vez que han venido panameños a estudiar a Israel. Casualmente, el año pasado llegó otro panameño, pero ya desde hace mucho tiempo ha habido panameños estudiando acá en el área de la agricultura.
-¿Qué estudió usted en Israel?
-Yo fui a estudiar mi título de Maestría, que básicamente se enfoca en las ciencias de las plantas. El título en inglés es “Plant Science”, pero traducido al español sería como “Ciencias de las plantas”.
-¿Y en qué consiste la ciencia de las plantas?
-Mi título abarca todo lo que es el área de fisiología de las plantas, las respuestas hormonales, el desarrollo de las plantas a un nivel más profundo de investigación para encontrar soluciones en el futuro a los grandes problemas que vamos a enfrentar en la agricultura. Para el 2050 ya es sabido por los estudios y las previsiones que la población mundial va a alcanzar los nueve billones de personas. Va a haber faltante de comida. También cada vez más estamos usando recursos de la tierra y cada vez más estamos talando bosques, que tampoco es bueno. Entonces tenemos que producir nuestra seguridad alimenticia, siendo más amigables con el medio ambiente.
-Cuando llegó a Israel y conoció el Keren Kayemet, donde plantan millones de árboles desde que existe el Estado de Israel, y por otro lado el desierto de la Aravá, de donde hoy se exporta el 70% de frutas y verduras del país, ¿cómo ve eso desde su especialidad?
-Es impresionante, y esa es una de las razones por las que mucha gente se viene a estudiar Agricultura a Israel. Primero porque es impresionante que puedan producir en un desierto como el Arava. Incluso se habla de que se iba a transformar en el invernadero de Europa, porque cuando es invierno allá, la mayoría de la producción que Europa consume viene de Israel. Principalmente del desierto de Arava. Entonces, para uno que estudia el ámbito de la agricultura, es impresionante cómo en un país que técnicamente no hay agua, que la tierra no es muy buena para los cultivos, que pueda proveer a gran parte de Europa, habla muy bien de la tecnología de Israel.
-¿Tuvo la oportunidad de vincularse con el KKL, que se dedica al plantado y al tema de aguas, y pudo ir también al desierto de Arava?
-Sí, más específicamente al desierto de Arava, porque me compete más en la agricultura, la producción, que la forestación por así decirlo. Sí pude ir. El solo hecho de que produzcan en el desierto es como sub-real.
-¿Cómo impacta esta ciencia en medio de una pandemia y un mundo que cambia a futuro?
-Yo creo que indudablemente la pandemia ha afectado el mundo. Una vez afectado el mundo, ha afectado todo lo que involucra al mundo, todo lo que es procedimientos humanos, y la agricultura no está exenta de eso. Creo que esta pandemia a todos los países nos ha enseñado que primero, en cuestiones de salud, no estamos tan preparados como pensamos. Y dentro de eso, dentro del área de salud pública, se incluye lo que es seguridad alimenticia. Si los países no tienen la suficiente estructura y capacidad para producir su propio alimento… mira como está el mundo con aquello de cerrar las exportaciones, ha tenido que limitar las incidencias de gente de otros países y de carga. Entonces, vivimos un situación en la cual no puede haber mucho intercambio entre los países, que el país produzca suficiente alimento para su población es demasiado importante.
-¿La decisión de ir a la Universidad Hebrea fue desde el comienzo o tenía opciones y fue esa su elección por su especialidad?
-Siempre estuvo entre mis opciones, era una de mis tres opciones, apliqué a otras dos universidades, pero al final salió la Universidad Hebrea.
La embajadora de Panamá en Israel, Adis Uriera, organizó una despedida para el estudiante.
-¿Cómo fue su convivencia con sus compañeros en la universidad?
-Bien, estuvo en un programa internacional, teníamos estudiantes israelíes en nuestros cursos pero la mayoría eran estudiantes internacionales como yo, entonces pude hacer una relación con estudiantes de todas partes del mundo, de África, Asia, Europa, otros de Latinoamérica como yo. Fue una convivencia muy buena, de intercambio de ideas, de cultura.
-¿Tuvo que explicar esta decisión de ir a estudiar a Israel a sus amigos?
-La mayoría de mis amigos se encontraron un poco sorprendidos, obviamente porque a nivel mundial lo que saben de Israel es acerca del conflicto. Entonces sí, les sorprendió un poco, pero algunos sí tenían noción de que Israel es muy bueno en el ámbito de las ciencias e investigación, especialmente en la agricultura. Igual, a los que no sabían les expliqué y a mi familia también, y quedaron bastante satisfechos.
-Y respecto a su experiencia, ¿ahora qué opina usted sobre el Estado de Israel?
-Me llevo una experiencia que fue haber convivido en el Medio Oriente, un mundo totalmente desconocido para mí viniendo de Latinoamérica, y me llevo una gran experiencia. Tuve la oportunidad de conocer a mucha gente de todas partes del mundo, y aprender la historia tan importante de Israel y todo lo que conlleva. La realidad es que me voy a ir con muy gratos recuerdos a Panamá.
-¿Cuál fue la convivencia con la sociedad israelí? ¿Pudo ir a la playa, pasear, ir a los lugares sagrados?
-Sí, gracias a D’s. Yo vine en 2019, así que pude el primer año conocer todo Israel y pasear bastante, especialmente el área de Jerusalem, que por todo lo que involucra a nivel histórico, es un área muy mágica, muy espiritual, muy interesante, y si me gustó mucho.
-¿Qué le lleva a Panamá como país?
-Primero, muchas ganas de trabajar, tengo muchas ganas de aportar todo lo que he aprendido acá en Israel, todos los conocimientos que he adquirido acá. Tengo mucho interés por trabajar por la seguridad alimenticia de Panamá, por tratar de impulsar la proyección y la producción local, tratando de traer técnicas que he aprendido acá, para ver si puedo aplicarlas en Panamá y trasmitir lo que he aprendido acá a los demás productores.
-¿Cómo califica la relación entre el Estado de Israel y Panamá?
-Sí, yo creo que son muy buenas. El año pasado firmamos un Tratado de Libre Comercio, lo cual abre muchas puertas de Panamá a Israel e Israel a Panamá, principalmente en lo que es los rubros agrícolas. Yo creo que las relaciones entre Panamá e Israel siempre han sido buenas. Aquí la embajada de Panamá me ha abierto las puertas, me han ayudado en todos los trámites y en todo lo que han podido ayudar, y sí creo que las relaciones son muy buenas.
-¿Cree que este corredor Panamá-Israel respecto al estudio va a continuar?
-Definitivamente va a haber mucho más interés de estudiantes panameños para venir a realizar sus estudios de posgrado acá en Israel. E inclusive el año pasado tuvimos muchos médicos que vinieron a hacer sus especialidades acá. Tuvimos un doctor que fue premiado por el Estado de Israel a nivel mundial por su especialidad en urología, y este año tuvimos acá otro estudiante de Panamá en la Universidad Hebrea de Jerusalem. Noto que cada vez van a venir más estudiantes latinos y panameños.
-La convivencia con los palestinos en muchos ámbitos de Jerusalem es extraordinaria. ¿Pasó por una situación como esa?
-Sí, en general uno se queda un poco sorprendido, porque lo que sale afuera es lo que los medios de comunicación quieren mostrar, pero no es lo que realmente está pasando acá. La política juega por su lado. Pero yo creo que en general el ser humano común quiere paz, quiere estar tranquilo, quiere disfrutar con su familia, con sus amigos una vida digna. Así que si todos vamos en esa dirección, pues algún día lo alcanzaremos.
-¿Israel deja un emisario en su persona para que los panameños escuchen y conozcan y tengan la oportunidad de conocer Israel?
-Sí, se los recomiendo a las persona que quieran venir, este es un país que te puede enseñar mucho y aprenderás mucho de él y es muy interesante.
Fuente: https://agenciaajn.com/noticia/estudiante-panameno-la-tecnologia-de-israel-en-agricultura-es-impresionante-163843